Tuesday, March 01, 2005

Bla Bla Bla

Por cosas de la vida estoy pasando gran parte del día sentado vendiendo discos en Agh Music, la tienda de Pepe Salomón, en las Galerías Brasil, es un trabajo temporal y sólo unos días por semana pero mientras puedo aprovecho para escuchar algunos discos de la colección de Pepe a los que no había tenido acceso antes. Son muchos, de hecho, cuando estuve sentado allí por primera vez tuve una crisis de decisión al saber que escuchar primero. Es complicado. Y ojo, no es igual que entrar al soulseek, es distinto. En la tienda tienes a tu costado paredes repletas de discos de muchas de tus bandas favoritas (con sus portadas!!!) y otras que seguramente lo serán y que te miran y te asedian, te seducen, te incitan. Como si un monstruo de 70 ojos te mirara apetitoso. Es complicado en realidad, pero bueno, al cabo de un rato pude superar mi crisis y terminé sumergido escuchando una serie de discos absolutamente fascinantes. Me dejaron perplejo Henry Cow y Brainticket pero sobre todo he quedado sorprendido al escuchar un disco peruano llamado “Sueño Psicodélico” de una banda peruana de mediados de los sesenta llamada Los Holy’s.
El disco, instrumental, integra el sonido de la psicodelia, el surf y vistosos arreglos que me hacían recordar a Paul Muriat, pero sin el tono dulcete que este tenía sino más bien en clara dirección psicodélica. Definitivamente los arreglos tienen un esmero milimétrico y en algunos casos forzando los límites de lo estrictamente rockero o de tema con melodía para dar paso a momentos de libre experimentación (las introducciones de algunos temas son sencillamente geniales, increíble todo lo que podían hacer con un teclado farfiza, aunque no se le resta méritos a quien dirigió los arreglos y al técnico de grabación, que si estuvo involucrado en el asunto pues debe ser considerado un visionario, la guitarra a veces suena como si estuviera sumergida en el agua!!!!).
Sonido expansivo, fuzztones, melodías escurridizas, extraño universo místico, devoción musical hacia los sonidos de la naturaleza y el cosmos. Simplemente una verdadera joya que no entiendo por qué demonios ha permanecido olvidada. Los más lisérgicos y los más arriesgados de todo lo que he escuchado de esta, la poco conocida, época dorada del rock peruano, que además de Los Saicos, Los Bekings y Los Yorks tiene mucho que descubrirnos aún.



Y mientras estaba oyendo el disco con los ojos en el vacío y gotas de sudor cayéndome por la sien, aparece para interrumpir mi despegue el siempre controvertido Leo Bacteria, el líder del único proyecto de música gabber hecho en el Perú: Insumisión. Bueno, Insumisión no existe más. Leo Bacteria ahora ha decidido armar un proyecto nuevo, Pestaña , cuyo estilo él ha definido como “Electroestupidez”. ¿Qué es la electroestupidez? Tiene que ver con un sonido electro teñido de una especie de ingenuidad subversiva que en algunos casos bordea la insanidad y la irracionalidad. Es decir, no es precisamente música que reivindique el espíritu nerd propio de buena parte del indie sino que reivindica la cojudez y lo kitch como deseo de desbaratarlo todo.
En España se conoce esto como Plaka Plaka o “electro todo vale” y tiene una nutrida cantidad se seguidores y proyectos. Un disco paradigmático es el Electrospain que editó el selló Subterfuge en el 2004 y que recoge proyectos como Superputa (los más divertidos de todo el lote), La Rubia Montoya, Focomelos (incluyen un tema que se llama “Mami me he comido un disco de Depeche Mode”, ya se harán una idea), LoFi, La monja enana, etc.. Y hasta aparecen los Ciëlo (peruanos radicados allá), que incluyen el tema que da título a su anunciado próximo disco, Radio Subterránea. Todas estas bandas están muy influenciadas por Fangoria y todo el universo de Alaska y Pegamoides, toda la irreverencia de la movida madrileña reinventada a través de un renovado sonido electro acorde con el despegue del electroclash (aunque para Leo Bacteria nada es pensable en España actualmente sin referirse a los legendarios Aerolíneas Federales, a quienes les ha armado un disco tributo, próximo a salir).
Bueno el caso es que tuve la oportunidad de escuchar los tan anunciados temas del tan anunciado nuevo grupo de Leo Bacteria y quedé bastante sorprendido, en realidad, como le decía: “si me dices que es un grupo español me lo creo”. Hasta canta como español, y es divertido y fresco (lo acompaña en la voz una jovencita de 16 años llamada Diana Exorcista y un tal Niño Bolsita en laptop). Por cierto, muchas de las programaciones han sido armadas por Dante González, un genio no descubierto en nuestro país (escuchen sino su kraftwerkiano “Diseñar y construir”, lástima nomás por sus musicalizaciones de performances de Danzantes de tijera que han dejado mucho que desear, pero igual, el compadre la rompe con los sintes).
Bueno, aquí viene el cherry, Leo Bacteria se presentará con Pestaña este miércoles 2 de marzo (11.00 pm) en el Eka Bar, en Miraflores. Vale la pena ir, si en vivo es tan bueno como suenan los temas pues no hay que perdérselo.

Ya para acabar, y cambiando radicalmente de tema, he descubierto que Clive Barker es un genio. Una semana antes un amigo me decía “por favor, consígueme Clive Barker”. Bueno, intrigado por la célebre Puerta al infierno me dio curiosidad por leer a este afamado escritor de relatos de horror. Bajé un relato que encontré en Internet y me pareció genial. Por cosas de la vida que no sé como explicar, desee encontrar más relatos pero no habían más, hasta que un día entro a Internet pongo en el google las palabras mágicas y me encuentro con una página que hasta ahora no puedo creer que exista. La web de Angie, una verdadera biblioteca de babel con cerca de 5000 títulos (bastante bien seleccionados) para bajar gratuitamente (sólo 3 por vez). Como entenderán, tengo que comprarme ahora un par de cartuchos de tinta para mi impresora y unos buenos cientos de hojas para imprimir todos esos relatos y novelas de Barker que dudo encuentre en alguna librería limeña. Cuanta sangre, cuanta sangre. Es hora de la carnicería.